La ansiedad es una afección común de la salud mental, y la prevalencia de los trastornos de ansiedad está aumentando en muchas partes del mundo. Para entender la ansiedad y su impacto en las personas, es importante conocer la clasificación NANDA.
¿Qué es la Ansiedad según la Clasificación NANDA? ¿Qué es la clasificación de la ansiedad de la NANDA?
L’Asociación de Diagnóstico de Enfermería de América del Norte (NANDA) de Norteamérica clasificación de la ansiedad es un sistema de categorización de la ansiedad en términos de su etiología, o las causas de la afección, sus características definitorias o síntomas, y sus factores relacionados. La clasificación NANDA proporciona un marco para que los profesionales sanitarios evalúen a los pacientes y determinen los criterios diagnósticos apropiados y las medidas de tratamiento.
Causas de la ansiedad según la clasificación NANDA
Las causas de la ansiedad son numerosas y variadas, y la clasificación NANDA refleja estas causas diferentes. Algunas personas pueden experimentar ansiedad como consecuencia de una afección médica, como un tiroides hiperactivo o la menopausia. En otros casos, la ansiedad puede ser consecuencia de sustancias, como la cafeína y el alcohol, o del consumo de determinados medicamentos. Factores psicológicos y ambientales, como un traumatismo o el estrés, también pueden provocar ansiedad.
Síntomas de la ansiedad según la Clasificación NANDA
La ansiedad se caracteriza por una serie de síntomas físicos, cognitivos y afectivos que la clasificación NANDA puede ayudar a categorizar. Los síntomas físicos pueden incluir inquietud, taquicardia, sudoración, temblores, dificultad para respirar y náuseas. Los síntomas cognitivos pueden incluir dificultad para concentrarse, preocupación o miedo, y pensamientos negativos o ideas obsesivas. Los síntomas afectivos pueden incluir tensión, irritabilidad y trastornos del sueño.
Tratamiento de la ansiedad según la Clasificación NANDA
El tratamiento de la ansiedad según la Clasificación NANDA se determina por la causa principal de la afección. Por ejemplo, si la ansiedad se debe a una afección médica, puede ser necesario tratar un problema médico subyacente. Del mismo modo, si la ansiedad se asocia al consumo de sustancias, hay que interrumpir dicho consumo.
La psicoterapia, las técnicas de relajación y los medicamentos también pueden utilizarse para controlar la ansiedad. La terapia cognitivo-conductual, que ayuda a las personas a identificar y cambiar pautas de pensamiento negativas, se ha demostrado eficaz para tratar la ansiedad. Las técnicas terapéuticas, como la reducción del estrés basada en la atención plena y la relajación muscular progresiva, también pueden ayudar a reducir los niveles de ansiedad.
En algunos casos, pueden recetarse medicamentos como inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) o benzodiacepinas para ayudar a controlar los síntomas de ansiedad. Estos medicamentos pueden ser útiles a corto plazo para tratar los síntomas, pero su uso a largo plazo puede provocar dependencia y efectos secundarios.
Conclusión
La ansiedad es una afección compleja y polifacética con numerosas causas subyacentes. La clasificación NANDA proporciona un marco a los profesionales sanitarios para identificar la ansiedad y determinar su etiología, síntomas y factores relacionados. Comprender la ansiedad según la clasificación NANDA puede ayudar a las personas a recibir la evaluación, el diagnóstico y el tratamiento adecuados. Es importante que las personas que experimentan ansiedad busquen ayuda profesional para lograr los mejores resultados.